martes, 8 de febrero de 2011

MVS: PRESA O ESLABON

Por Gerardo Herrera.

Luego del incidente que ha sido considerado como un quebranto a la libertad de expresión, y que tiene que ver con la segunda vez en que a Carmen Aristegui le apagan el micrófono, obedeciendo la presión del gobierno federal, según un trascendido a través del twitter de la periodista Lidia Cacho, la comunidad cibernauta ha mostrado su potente músculo.

Miles de personas en Facebook y Twitter han calificado el hecho como un ultraje a la libertad de expresarse en nuestro país, y este hecho sucede en la víspera de la discusión de la recién anunciada reforma poblana a la Ley de Medios, según se ha llamado, que ha enviado el ejecutivo del estado Rafael Moreno Valle, con la intención de perfeccionar las leyes estatales que den certidumbre a la actividad periodística y los medios de comunicación.

Tan polémico ha resultado este tema, que la sesión del Congreso ha decidido postergar su discusión obedeciendo quizá al reclamo generalizado, de que debe estudiarse con mayor profundidad los alcances de éstas reformas.

Y es que preocupa a más de uno, la velada amenaza de la censura, cuando el delito de difamación y calumnia pase de ser sancionado por el Código Penal para ser tratado mediante el Código Civil bajo el término de “daño moral” que no implica pena corporal, pero si el daño patrimonial.

Pero los diputados aceptaron no haber leído siquiera la iniciativa. Bien por ellos.

Pero volviendo al tema nacional, la censura a Aristegui es la prueba fehaciente de que en México, urge reconocer y hacer valer los derechos y leyes que protegen a los verdaderos periodistas. Entiéndase por verdaderos, los que puedan sujetarse al escrutinio público, al análisis del origen de sus comentarios, y la procedencia de sus bienes.

Carmen, que ha sido calificada como “figura crítica del periodismo mexicano” es vista hoy como mártir por cientos de simpatizantes que le han pedido a su ex empresa MVS reconsidere la posibilidad de devolverle a la periodista su espacio noticioso. Es MVS pues el otro eslabón de la censura.

Esta empresa sufrió la presión gubernamental para deshacerse de la señora incómoda. Permitió la violación no solamente de los derechos de Aristegui, sino paso por encima de los propios, al aceptar se dicten órdenes desde otro escritorio, tal y como se acostumbra en otros medios, como Televisa, por ejemplo.

Mientras esto sucede, ya se prepara un boicot similar a la Operation Payback, que convocó el grupo Anonymous a las empresas que censuraron a Wikileaks. A través del blog http://boicotmvs.wordpress.com se está convocando a dos distintos bombardeos cibernéticos para dejar inutilizado los portales que mantiene la empresa MVS en dos distintas fechas y horas: Miércoles 9 a las 20:00 horas, y jueves 11 de febrero a las 17:00 horas.

Será interesante observar la capacidad de convocatoria, el interés que provoque el giro que pueda tomar la decisión de la empresa MVS y los alcances que pueda provocar tal movilización en la red.

Estaríamos los mexicanos entonces, inaugurando una forma más de protesta, que esperamos no sea en lo futuro, hostigada.

Necesario se ha convertida ya, y urgente, que el vocero presidencial haga uso de su papel.